Dilemas

Me gustaría hacer notar que nuestra agitada vida se encuentra rodeada de pequeños dilemas, a saber, un dilema interesante se plantea cuando uno tiene mucha sed y al mismo tiempo muchas ganas de orinar, no hace falta decir que tanto en un caso como en otro es de un gran alivio deshacerse de tales molestias. El dilema surge a la hora de decidir cual primero, yo he puesto en práctica una solución original: las dos al mismo tiempo. El placer aumenta y es muy curiosa la imagen de ver como un liquido entra por el orificio superior al mismo tiempo que otro hace su salida por el inferior, aunque tiene como inconveniente que no queda bien en publico. Pruébalo! Otro pequeño dilema surge a la hora de deshacerse de algún gas molesto a la vez que desagradable, en este caso el dilema surge cuando uno quiere decidir donde hace la agradable y olorosa evacuación, en este caso entran en juego factores tan importantes como la temperatura ambiente o la mínima distancia a la que se encuentra un posible receptor, con lo que se hace necesario introducir el concepto de distancia de seguridad (mínima distancia a la cual un sujeto no es capaz de detectar un determinado olor). He comprobado que a temperaturas bajas la nube de gas, tiene mayor capacidad de expansión, por lo que la distancia antes citada debe aumentarse. R(t)= H*(Tc - Ta)*P*K(t) Esta expresión nos da el radio, que podríamos llamar oloroso, de la nube de gas en función del tiempo, donde: Tc es la temperatura corporal. Ta es la temperatura ambiente. P es la presion a la que el gas es expulsado. K(t) es la concentración de gas en función del tiempo. H es un factor de no idealidad. Así que como conclusión, no aconsejo evacuaciones arriesgadas dada la dependencia de tantos factores, por no hablar de efectos sonoros en lugares de permanente silencio relativo, en ese caso el riesgo de pasar vergüenza es verdaderamente elevado si no se contiene la evacuación. Sería interesante una ecuación que incorporara dicho efecto. Otro dilema curioso es cuando en clase de SED haces una pregunta y Julio no te hace ni puto caso, en ese caso dudas entre volver ha hacer la pregunta o callarte. Si optas por volver ha hacer la pregunta se ha dado el caso en que Julio te vuelve a ignorar por segunda vez, en este supuesto yo personalmente siempre marco la opción de reintentar, ya que de no hacerlo corres el riesgo de sentirte un poco como aire, no? Siempre claro queda el recurso de reírte y pasar de todo, si no se eligen las opciones anteriores. En fin podría seguir, pero me voy a poner a hacer analógica. Nos vemos mañana.